1Mientras Jesús y los discípulos se acercaban a Jerusalén, llegaron a la ciudad de Betfagé, en el monte de los Olivos. Jesús mandó a dos de ellos que se adelantaran.
4Eso ocurrió para que se cumpliera la profecía que decía:
5«Dile a la gente de Jerusalén:*21:5a En griego Dile a la hija de Sion. Is 62:11.
“Mira, tu Rey viene hacia ti.
Es humilde y llega montado en un burro:
montado en la cría de una burra”»*21:5b Za 9:9..
6Los dos discípulos hicieron tal como Jesús les había ordenado.
8De la multitud presente, la mayoría tendió sus prendas sobre el camino delante de él, y otros cortaron ramas de los árboles y las extendieron sobre el camino.
«¡Alaben a Dios*21:9a En griego Hosanna, una exclamación de alabanza que literalmente significa «salva ahora»; también en el 21:9b, 15. por el Hijo de David!
¡Bendiciones al que viene en el nombre del Señor!
¡Alaben a Dios en el cielo más alto!»*21:9b Sal 118:25-26; 148:1..
10Toda la ciudad de Jerusalén estaba alborotada a medida que Jesús entraba. «¿Quién es este?», preguntaban.
11Y las multitudes contestaban: «Es Jesús, el profeta de Nazaret de Galilea».
12Jesús entró en el templo y comenzó a echar a todos los que compraban y vendían animales para el sacrificio. Volcó las mesas de los cambistas y las sillas de los que vendían palomas.
14Los ciegos y los cojos se acercaron a Jesús en el templo y él los sanó.
Sin embargo, los líderes estaban indignados.
—¿Oyes lo que dicen esos niños?
—Sí —contestó Jesús—. ¿No han leído las Escrituras? Pues dicen: “A los niños y a los bebés les has enseñado a darte alabanza”*21:16 Sal 8:2 (versión griega)..
17Luego regresó a Betania, donde pasó la noche.
18Por la mañana, cuando Jesús regresaba a Jerusalén, tuvo hambre
20Al ver eso los discípulos quedaron asombrados y le preguntaron:
—¿Cómo se marchitó tan rápido la higuera?
21Entonces Jesús les dijo:
—Les digo la verdad, si tienen fe y no dudan, pueden hacer cosas como esa y mucho más. Hasta pueden decirle a esta montaña: “Levántate y échate al mar”, y sucederá.
23Cuando Jesús regresó al templo y comenzó a enseñar, se le acercaron los principales sacerdotes y los ancianos.
—¿Con qué autoridad haces todas estas cosas? —le reclamaron—. ¿Quién te dio el derecho?
24—Les diré con qué autoridad hago estas cosas si me contestan una pregunta —respondió Jesús—.
Ellos discutieron el asunto unos con otros: «Si decimos que provenía del cielo, nos preguntará por qué no le creímos a Juan;
—No sabemos.
Y Jesús respondió:
—Entonces yo tampoco les diré con qué autoridad hago estas cosas.
28»¿Pero qué piensan de lo siguiente? Un hombre con dos hijos le dijo al mayor: “Hijo, ve a trabajar al viñedo hoy”.
31»¿Cuál de los dos obedeció al padre?
Ellos contestaron:
—El primero.*21:29-31 Otros manuscritos dicen —El segundo. Incluso en otros manuscritos, el primer hijo dice «Sí», pero no hace nada; el segundo dice «No», pero luego se arrepiente y va; y la respuesta a la pregunta de Jesús es que el segundo hijo obedeció a su padre.
Luego Jesús explicó el significado:
—Les digo la verdad, los corruptos cobradores de impuestos y las prostitutas entrarán en el reino de Dios antes que ustedes.
33»Ahora, escuchen otra historia. Cierto propietario plantó un viñedo, lo cercó con un muro, cavó un hoyo para extraer el jugo de las uvas y construyó una torre de vigilancia. Luego les alquiló el viñedo a unos agricultores arrendatarios y se mudó a otro país.
37»Finalmente, el dueño envió a su propio hijo porque pensó: “Sin duda, respetarán a mi hijo”.
38»Sin embargo, cuando los agricultores vieron que venía el hijo, se dijeron unos a otros: “Aquí viene el heredero de esta propiedad. Vamos, matémoslo y nos quedaremos con la propiedad”.
40Jesús preguntó:
—Cuando el dueño del viñedo regrese, ¿qué les parece que hará con esos agricultores?
41Los líderes religiosos contestaron:
—A los hombres malvados les dará una muerte horrible y alquilará el viñedo a otros que le darán su porción después de cada cosecha.
42Entonces Jesús les preguntó:
—¿Nunca leyeron en las Escrituras:
“La piedra que los constructores rechazaron
ahora se ha convertido en la piedra principal.
Esto es obra del Señor
y es maravilloso verlo”*21:42 Sal 118:22-23.?
43Les digo que a ustedes se les quitará el reino de Dios y se le dará a una nación que producirá el fruto esperado.
45Cuando los principales sacerdotes y los fariseos oyeron esa parábola, se dieron cuenta de que contaba esa historia en contra de ellos, pues ellos eran los agricultores malvados.